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Notas al programa Obras de Wagner y Schubert. Wagner: Wesendonck Lieder L as dos ünicas partituras no escenicas de Wagner que han pervivido en el repertorio de concierto surgieron como resultado de un impulso personal originado por su amor hacia dos mujeres. Los Wesendonck Lieder, sobre lexlos de Mathilde Wesendonck, o mäs exactamen- le los Cinco poemas para voz femenina —bajo este titulo se publicaron por el editor Schott en Mainz, en 1862— deben su inspiraciön a la relaciön mäs que amistosa que Wagner sostuvo con Mathilde Wesendonck, esposa del comer- ciante en sedas Otto Wesendonck. La otra obra en cuestiön, el Siegfried. Idyll, cons- tituyö la ofrenda del compositor a su segunda esposa, Cosima, con motivo del trigesimo tercer aniversario de esta. Si el Idyll se emparienta temäticamente con la müsica del tercer acto de la öpera Siegfried, que ayer escuchäbamos completa en este Palau, los Wesendonck Lieder presentan un fuerte parentesco temätico y emotivo con la müsica de Tristan und Isolde. Dos de los Lieder —el tercero, Im Treibhaus, y el quinto, Träume— anaden a su titulo la indicaciön de «estudios para Tristan und Isolde». En Im Treibhaus la alusiön temätica se refiere al preludio del tercer acto de la öpera, mientras que Träume se relaciona directamente con el gran düo de amor (O sink’ hernieder, Nacht der Liebe) del segundo acto de la misma. El conjunto de los Wesendonck Lieder fue concebido con acompanamiento pianistico y solo el quinto de eilos tiene orquestaciön del propio Wagner, que el compositor hizo interpretar por una pequena orquesla en el exterior de la villa de los Wesendonck, a manera de regalo de cumpleanos para Mathilde. Las demäs canciones deben su orquestaciön al director Felix Mottl (1856- 1911), quien luego de ser asistente de direcciön en Bayreuth dirigiria alli a partir de 1886.
